Crimen organizado envuelve historial delictivo del 40% de jóvenes en Puebla

Tortura por parte de elementos de la policía es lo que aseguran haber sido víctimas al menos 7 de cada 10 jóvenes encarcelados en el Centro de Internamiento Especializado para Adolescentes de Puebla, quienes en su mayoría también afirman haber formado parte de grupos del crimen organizado.

Al menos 40 por ciento de los jóvenes que cumplen una condena en el reformatorio estatal se encuentran registrados con actividad delictiva de crimen organizado, siendo ésta cifra superior a la del promedio revisado en 13 estados del país y que es del 35 por ciento.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) presentó los resultados del informe especial “Adolescentes: Vulnerabilidad y Violencia” que basa sus datos en encuestas aplicadas a presos de 13 entidades federativas durante 2016, con un total de 730 encuestas, donde 38 correspondieron a Puebla.

16% de jóvenes en condena en el CIEPA en Puebla aseguraron
formar parte de pandillas. Foto: Diario Puntual.

Las respuestas dadas por los adolescentes presos advierten sobre violencia y una mayor vinculación de jóvenes con grupos delictivos organizados, que colocan a la entidad con una calificación de 6 puntos donde 10 es la mejor y de las entidades evaluadas, solo Veracruz y Durango la obtuvieron.

Mientras el 40 por ciento de los encuestados en la cárcel juvenil del estado confirmaron haber formado parte de grupos delictivos organizados, el 16 por ciento indicó que en su caso fue integrar pandillas y el 44 por ciento restante, por actos individuales.

Torturas, la constante

Aunado a la relación de jóvenes con el crimenorganizado, se advierte que en Puebla existe un alto número de adolescentes que cumplen condenas y que afirman haber sido víctimas de tortura durante su detención o encarcelamiento, tal es el caso del 71 por ciento de los encuestados por la CNDH, la segunda cifra más alta de las 13 entidades evaluadas.

Un chico indígena encarcelado en Puebla declaró: 

“me detuvieron y me llevaron a la Procuraduría, ahí me pusieron agua, toques eléctricos, bolsa en la cabeza y me patearon las costillas; todavía sigo lastimado”.

Por su parte, otro joven, detenido por el delito de secuestro, relató a la CNDH: 

“nos golpearon a todos, nos llevaron vendados y esposados y, durante dos días, nos estuvieron pegando. Me agarraron los ministeriales y ellos hicieron las declaraciones y nos hicieron firmar todo lo que ellos pusieron y nunca me dejaron declarar, y aunque dije que yo no había dicho nada de eso, no me creyeron y la juez dijo que no me daba más sentencia porque no había más. Yo no pude ver a mi mamá hasta que me sentenciaron, estuve dos meses sin que me comunicaran y mi mamá ya había pensado lo peor porque me había buscado en hospitales, en todas partes y no sabía nada de mí”.

Condenas bajo inocencia

La tortura aplicada a los adolescentes en Puebla no fue la única observación que se señaló en el informe, también se destaca que el 5 por ciento de los encuestados, aseguran cumplir una condena bajoinocencia y es que afirman que no cometieron ningún delito.

Es importante señalar que Puebla, junto con Jalisco y Estado de México presentan los menores indicadores en este punto, no así estados como Veracruz y Oaxaca, que alcanzan reportes del 37 y 44 por ciento, respectivamente.

Un joven interno refiere: 

“Soy inocente. Yo estaba en mi casa, en la mañana, estaba acostado y tocaron la puerta, pensé que era cualquier persona, pero entraron los oficiales del Ministerio Público. Me tiraron, me golpearon y me llevaron al MinisterioPúblico. Ahí me siguieron golpeando y me preguntaban que en dónde estaban mis compañeros, me desvistieron, me vendaron, me tiraron al piso y me siguieron golpeando. Después me dijeron que confesara y me ahogaron y yo les decía que yo no fui, pero les tuve que decir que sí porque ya no aguantaba más; entonces me hicieron firmar y me llevaron a los separos”.

Una historia que integra la CNDH en su informe ubica a un joven que acudió con su novia a una fiesta; el problema comenzó cuando pasaron en medio de una banda quienes los comenzaron a insultar por lo que tuvieron una riña, lo que provocó el enojo de la banda y motivo el secuestro y muerte de la novia, colocando su cuerpo en un tambo dentro del edificio del joven detenido, quien decidió culparse ante amenazas de la policía de involucrar a sus padres. 

“Nunca me permitieron tener un abogado. Siento rencor con la banda que mató a mi novia y conmigo mismo porque la involucré en esa pelea. La violencia en la colonia deben pararla porque yo llegué aquí por esa banda que sigue allá afuera”.

Homicidio y secuestro, los delitos con mayor presencia
en jóvenes que cumplen condena en Puebla.
Foto: PrimeraHora.com 

En torno a la baja calificación que presentó el Centro de Internamiento Especializado para Adolescentes de Puebla, los jóvenes entrevistados reprueban la condición que presentan las instalaciones, la renovación de las pláticas que dictan a los jóvenes, el poder que presentan los custodios sobre los reos al imponer reglas de poder y cometer constantes abusos, que no haya materiales para los talleres o que éstos corran a cargo del gasto de los reos, son algunas de las observaciones hechas por los reclusos.

De acuerdo con el registro oficial del reformatorio juvenil actualizado a 2016, en Puebla un total de 69 jóvenes cumplen condenas, el 45 por ciento de estos por homicidio, el 19 por ciento por secuestro y el 9 por ciento por violación, siendo estos lo delitos con mayor presencia.