Inversiones menores al 1 por ciento del costo total de un inmueble deben destinar empresarios a la renovación de sus instalaciones eléctricas cada cinco años, señalaron especialistas de la Asociación Poblana de Comerciantes de Equipo Eléctrico (APCE), al afirmar que existen más de 200 mil propiedades en riesgo por la antigüedad de su sistema eléctrico.
Durante la presentación del programa Casa Segura, especialistas en equipo eléctrico alertaron sobre la situación que presentan tanto viviendas como empresas e instituciones, debido a la antigüedad de su sistema eléctrico con más de 20 años, según expone un estudio realizado por el Centro Mexicano de Promoción del Cobre (Procobre).
De acuerdo con el consultor de Procobre, Enrique Balan Romero, en Puebla existen graves riesgos en las viviendas que presentan más de 20 años de antigüedad, ya que sus instalaciones eléctricas se presentan obsoletos lo que podría ocasionar incidentes mayores por el inadecuado consumo de la energía eléctrica.
Estudios realizados durante el 2009 arrojan la existencia de 200 mil propiedades en la ciudad de Puebla con alto riesgo de accidentes eléctricos, ya sea porque su instalación no cumple con la normatividad actual, porque no se les ha dado el mantenimiento necesario, porque la demanda de consumo eléctrico es mayor, o porque se ha rebasado el tiempo promedio de vida de la instalación.
El consultor de Procobre señaló que la inversión estimada en la actualización del sistema eléctrico oscila entre el 0.4 y el 0.9 por ciento del total del valor del inmueble, lo que resulta dijo, insignificativo si se compara con el gasto destinado a cubrir el consumo en energía eléctrica.
En este sentido recomendó un mantenimiento cada cinco años a las instalaciones eléctricas para evitar que se degraden los materiales de uso y con ello, se acelere el tiempo de vida del sistema.
Según datos oficiales, en el país se registran en promedio 230 defunciones por accidentes provocados por el desgaste de una instalación eléctrica, lo que representa el 35 por ciento del total de muertes registradas en el país al año.
En este contexto se llevo a cabo la presentación del programa Casa Segura que tiene como objetivo promover una cultura de prevención de accidentes en empresas y viviendas, para ello, sumaron esfuerzos diversos organismos entre ellos: Cámara de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco); Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas de Puebla (CIME); y Colegio de Arquitectos de Puebla (CAPAC).
Además del Colegio de Ingenieros Civiles de Puebla (CICEPAC); Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC); Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex); Confederación Nacional de Asociaciones de Material y Equipo Eléctrico (Conacomee); y el Centro Mexicano de Promoción del Cobre (Procobre).
El programa Casa Seguro surgió en 2007 en el Distrito Federal, como una iniciativa de entidades comprometidas con el valor de la vida humana, la defensa del patrimonio y la seguridad de la familia.
En 2008 llegó a Guadalajara y un año más tarde se integró a Monterrey además de Puebla, a través de la APCE.
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